La imagen sufrió una leve incisión en un pie La lesión no es importante pero se cierra el acceso al altar hasta poner medios seguros
F.A. JEREZ | ACTUALIZADO 06.07.2013 - 01:00
El triste capítulo que ha padecido la hermandad del Santo Crucifijo de la Salud, por la leve incisión intencionada que se descubrió en un pie del crucificado, tiene ya consecuencias. Además de la revisión que realizado del daño la restauradora María Paz Barbero, la cofradía ha decidido dejar cerrado el altar que preside la imagen hasta que no se tomen medidas que garanticen una mayor seguridad que haga posible que no vuelvan a producirse actos como este o incluso otros más graves. Entre tanto, la Virgen de la Encarnación ocupa el altar mientras que el Crucifijo sea sometido a la intervención, de poca importancia, en el pie dañado. En una información de la propia cofradía, se informa que la reja está cerrada y confirma el diagnóstico de la especialista: "las lesiones de la imagen no son importantes y pueden ser restauradas con prontitud, pero en cualquier caso, la junta de gobierno ha estimado conveniente cerrar la posibilidad de acceder al altar del Santo Crucifijo mientras no se proceda a su restauración y se estudie la instalación de alguna medida de seguridad como nos ha aconsejado el Cuerpo Nacional de Policía, que visitó San Miguel tras la denuncia presentada por la hermandad".
La junta que preside como hermano mayor Luis Cruz, sí toma como un serio aviso lo que ha ocurrido, "todos cuantos componemos esta hermandad asumimos el riesgo que corren nuestros titulares y nuestro patrimonio ante la presencia de cualquier desalmado que quiera hacer daño, sea cuales fueren las causas". En cuanto a las medidas de seguridad, aún no están definidas, "se estudiarán para que las acreciente pero manteniendo la premisa de que el culto y la oración a nuestros titulares debe mantenerse como hasta ahora, como siempre. Nadie va a impedir que todos cuantos vemos a Cristo en el Santo Crucifijo, podamos sentirlo, admirarlo y besarlo, y muchos menos en estos momentos en los que tanto necesitamos de la cercanía de su amor".
La hermandad agradece las muestras de cariño que ha recibido en estos días desde que se produjo el lamentable incidente.
La junta que preside como hermano mayor Luis Cruz, sí toma como un serio aviso lo que ha ocurrido, "todos cuantos componemos esta hermandad asumimos el riesgo que corren nuestros titulares y nuestro patrimonio ante la presencia de cualquier desalmado que quiera hacer daño, sea cuales fueren las causas". En cuanto a las medidas de seguridad, aún no están definidas, "se estudiarán para que las acreciente pero manteniendo la premisa de que el culto y la oración a nuestros titulares debe mantenerse como hasta ahora, como siempre. Nadie va a impedir que todos cuantos vemos a Cristo en el Santo Crucifijo, podamos sentirlo, admirarlo y besarlo, y muchos menos en estos momentos en los que tanto necesitamos de la cercanía de su amor".
La hermandad agradece las muestras de cariño que ha recibido en estos días desde que se produjo el lamentable incidente.
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