¿Cómo conseguir que los jóvenes formen un grupo estable en la parroquia? ¿Cómo evitar que desaparezcan de la comunidad después del sacramento de la Confirmación? Es el eterno quebradero de cabeza de muchos agentes de pastoral sacerdotes y laicos. Tres seminaristas de Cádiz fuimos enviados a Barcelona con la promesa de que allí se nos daría una respuesta por medio de Life Teen, que celebraba su encuentro europeo anual.
Y allí se dieron cita jóvenes y no tan jóvenes de diversos países y regiones de España. Steve Allgeyer, un americano simpático y enorme de Missouri, vicepresidente de Life Teen nos explicaba el primer día: –No es un movimiento oficial de la Iglesia Católica. Es la catequesis de siempre, está plenamente basado en la parroquia y tiene como pilares fundamentales la Eucaristía y la Virgen María.
Randy Raus, el fundador, cuando discernía la llamada de Dios a poner en marcha este método, tuvo ocasión de conocer a la Madre Teresa y le preguntó: –Madre Teresa ¿qué debería hacer Life Teen?” –Llévalos a la Eucaristía. –¿Eso es todo? –preguntó él–. Pero debe de haber algo más. Madre Teresa respondió: –No os preocupéis por los números, ayudad sólo a una persona a la vez y empezad por la que esté más cerca de vosotros. Y así comenzó Life Teen, con notable éxito en las parroquias donde se ha implantado. Su finalidad es formar catequistas que susciten en el joven un deseo de conocer él mismo su fe.
El catequista debe cuidar su santidad personal y debe estar en camino, igual que el joven. “En un avión –decía Steve– cuando la cabina se despresuriza primero tomamos nosotros el oxígeno de emergencia y después se lo damos al que está al lado. Es igual con la catequesis: yo necesito primero alimentarme y sólo así podré comunicar a los jóvenes. Y no imagináis cuantas presiones soporta el joven actual”.
El encuentro se desarrolló de forma intensiva todo el fin de semana, con ponencias y talleres. La liturgia que tuvimos a lo largo de esos días se celebró con la música de alabanza que es habitual en Life Teen, con ritmos electrizantes, guitarras y batería. El cuidado de la música para que tenga un estilo popular urbano y sea de calidad es la clave que explica el éxito de Life Teen.
El grupo de Cádiz disfrutó de unos momentos inolvidables de convivencia. Al fin y al cabo, de eso va Life Teen, de convivir. “Lo fundamental es compartir un espacio ¬–dice Steve Allgeyer– Nada de empezar por catequesis teóricas y doctrinales. A los adolescentes no les importa lo que tú sabes hasta que no saben lo que te importa. Compartamos espacios. El propio Dios quiso compartir espacio con nosotros enviándonos a su Hijo Amado”.
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